Cada día recibimos una cantidad ingente de datos. Pero, de todos ellos, ¿cuántos omitimos? Evidentemente, muchísimos. Algunos porque nuestro cerebro los descarta ipso facto; otros, porque no nos paramos a extraerlos del resto de información.
Y estos últimos, precisamente, podrían ser los más importantes: en ocasiones pueden salvar vidas. Descubrir qué se esconde detrás de una foto puede ayudar a encontrar criminales… ¿pero cómo?
A modo de ejemplo, vamos a geolocalizar y cronolocalizar una imagen. A partir de herramientas de investigación Open Source y cálculos científicos, tal como lo harían los especialistas en inteligencia de la CIA, intentaremos rebelar la gran cantidad de información que aparece detrás de una simple imagen.
¿Conseguiremos descubrir dónde y cuando se tomó?