Un estudio publicado en el año 2022 por la Red de Pobreza Energética (RedPE) identificó que el 34,3% de los hogares en las zonas urbanas de Chile se encuentran en situación de pobreza energética.
La pobreza energética se define como la falta de acceso equitativo a servicios energéticos de alta calidad en un hogar, para cubrir sus necesidades fundamentales y básicas, que permitan llevar a cabo el desarrollo humano y económico de sus miembros (Red PE 2022). Para hacer análisis en esta materia y estudiar la pobreza no basta sólo con el acceso, sino también la calidad de éste.
A comienzos del año 2022, el Ministerio de Energía de Chile publicó un documento «Acceso equitativo a la energía sostenible», que posiciona el concepto de la equidad como un valor. En esta instancia la pobreza energética se considera como un problema de política pública y la forma más común de caracterizarla ha sido a partir de cuatro dimensiones que se vinculan entre sí. A continuación se explican:
- Habitabilidad, que se refiere a las condiciones de la vivienda.
- Acceso físico relativo a las fuentes de energía y elementos necesarios para satisfacer las necesidades.
- Calidad del suministro.
- Asequibilidad o equidad, gasto en energía y el impacto en la economía doméstica.
La pobreza energética se define como la falta de acceso equitativo a servicios energéticos de alta calidad en un hogar
Estudio 2022 Red PE
Foto: Priscila Duarte (hogar rural de la comuna de Putre 2024. Chile)
¿Cómo andamos por casa?
Todos los hogares demandan necesidades energéticas que varían según la naturaleza de sus moradores, por ejemplo, un espacio con niños genera necesidades diferentes a una morada constituida por adultos en edad productiva que salen gran parte del día a sus lugares de trabajo y más gasto energético podría generar una familia donde uno de sus miembros es electrodependiente debido a una condición de salud.
Según el Policy Paper Nº3 de pobreza Energética del CR2- Universidad de Chile , las necesidades energéticas se clasifican en las siguientes: alimentación, cocción y conservación de alimentos; higiene, correspondiente al agua caliente sanitaria; iluminación, comunicación y entretención, referente al uso de aparatos electrónicos y electrodomésticos; y climatización (temperatura saludable), calefacción y/o aire acondicionado.
A continuación, se puede revisar infografías que evidencia una radiografía que muestra las brechas en el acceso de servicios energéticos en los hogares en Chile.
Un poco de historia y contexto
El concepto de pobreza energética se origina en el Reino Unido, contextualizado en los años ’70 cuando hubo una carencia de combustible para la calefacción producto de la crisis mundial del petróleo. De ahí que se ha considerado a nivel global el concepto de pobreza energética y se masifica en la década de los ’90 como fuel poverty y ha ido tomando terreno en diversas instancias y países, siendo incorporado en el 2015 en los Objetivos de Desarrollo sustentable de las Nacionales Unidas y reconocido como uno de los ejes estratégicos por la International Energy Agency en el 2017 y por el World Energy Council en el 2016.
Energía sostenible para todos
La crisis climática que enfrentamos hace aún más desafiante la sostenibilidad energética de los hogares e incluso amenaza con acentuar las desigualdades en el acceso a servicios energéticos de calidad, considerando que la brecha ya es importante de atender y hoy se suma el desafío de descarbonizar la matriz energética al 2050, como lo ha planteado el Estado de Chile en su política energética.
Una de las consecuencias del aceleramiento del cambio climático es que afecta los patrones de temperatura y desafía el confort térmico. Si bien la pobreza energética se ha centrado generalmente en la calidad del confort térmico frente al frío, crecientemente con la llegada de episodios de calor extremo y la posibilidad de acondicionar los espacios se vuelve central, tal como lo demuestran eventos de olas de calor en distintos lugares del mundo, fenómeno que ya ha cobrado la vida de miles de personas.
Así es que como la emergencia climática va sumando diversas aristas que los diferentes estados deben abordar desde las herramientas que les facultan las políticas públicas, según sean las dimensiones de las necesidades de sus países. En esta materia no se puede desatender la pobreza energética desde una perspectiva de género y equidad, territorialidad, que incluye a las poblaciones indígenas y sus costumbres, y la educación, pero esto ya es tema de otro post.
Pobreza Energética – La Vida Misma
Para comprender que la pobreza energética es una problemática global y que afecta a los cinco continentes, los invito a revisar una cápsula audiovisual que expone esta complejidad en España, donde afecta a más de 5 millones de personas. No puedes terminar este post sin ver Pobreza Energética, de la Vida Misma, que muestra la realidad de Teresa, Paco y el largo invierno.
Midiendo la pobreza energética, una revisión de indicadores
Estudio Ministerio de Energía Chile Acceso equitativo a la energía sostenible (2022)
Qué es la pobreza energética y por qué importa como política pública
Revisa los post de mis compañeros en este blog
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